Hay una gran variedad de mentas, si bien es la Piperita, la variedad más utilizada, ya que es de sabor y aroma fuerte y a su vez es muy fácil de cultivar.
Todavía podemos encontrar menta silvestres cerca de arroyos y ríos, y en zonas húmedas y sombrías.
La recolección suele hacerse en verano, pero debemos tener cuidado con las flores ya que tienen un fuerte efecto hipnótico.
El tallo es cuadrangular y las hojas son serradas.
Es antiespasmódica, carminativa, antiséptica, balsámica y dicen afrodisíaca.
Se usa para mejorar la función biliar y facilitar las digestiones. Para impedir gases intestinales y suavizar los espasmos. Puede ayudar el mareo en los viajes, el vértigo , las palpitaciones nerviosas, los dolores de cabeza y fluidifica las vías respiratorias.
Externamente se usa como antiséptico.
Combate el mal aliento y y se le atribuyen propiedades afrodisíacas sobre todo para la mujer.
Culinariamente: Se utiliza mucho en licores, bálsamos y se puede usar en cocina, tanto en frío como en caliente y tanto en platos salados como en dulces.
Se toma también como infusión, bien por el sabor, bien por sus propiedades.
El aceite esencial, no es recomendable para las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
Es muy fácil de cultivar, ya que solo necesita mucha agua y estar a la sombra. Incluso cuando se seca puede volver a rebrotar.
Mitología:
Mente era una bella ninfa asociada al río Cocito de la que Hades, dios del inframundo se enamoró perdidamente. En algunas versiones se dice que era una amante anterior a su esposa Perséfone, pero en la mayoría están de acuerdo en que el dios, le fue infiel con ella a su esposa. El caso, Perséfone se enteró de la relación que estos mantenían y en un ataque de celos, persiguió a la ninfa, la lanzo al suelo y la pisoteó hasta matarla. De sus restos Hades creó la Menta.